jueves, 31 de octubre de 2013

celestina de tí misma

celestina de tí misma, tanto confort te causa?... en realidad no es penoso (tampoco podemos decir que es turismo sexual) sino que un estado pasajero que, con calma y raciocinio, pasa o se aleja de uno. celestina de tí misma, para que?... en general, ese encanto que te tienes por querer saciar tus cienes de dulce amor nocturno (muy poeta para explicarte el miedo que me causa decirte esto pero...), te coartas al final porque no sigues tu tradición... esa pasión única e irrepetible por saciar ese fuego primo, ese primer momento (donde el juego aun es juego y no existe lo real). Entiendo, claro, la necesidad de volver a quemar esas ganas iniciales a cada momento... donde el personaje no es mas idealizado de lo que ya es, donde los misterios respecto a la información necesaria no son más que idea (e ideas solamente). no existe en realidad una necesidad de ser celestina de ti misma al menos que sólo quieras vivir la esporádica necesidad de apego inicial, de roce intenso (ese que es calenton con sus piscolas locas and a lill' bit of weed, you know...) pero, siendo somero, te quedas en eso, y sólo te quedas en eso por miedo a que terminarás picando la cebolla, pelando el tomate y acuchillando el perejil pa' hacer el buen pebre... entonces, cabe recordar que no es decisión propia - al final si lo quieres, si quieres decir que si al pebre cuchareado - pero te detiene ese impetu salvaje y animal de querer encontrar el punto de quiebre - también he estado ahi... he terminado en el mapocho comiendo manzanas confitadas de dudosa procedencia a dudosas horas de la mañana - dejémonos de pavadas... en realidad no os interesa en nada esto y aquello tampoco, y te aterra la idea de pertenecer por ese miedo innato en algunas mujeres de ser feliz... de no creer en la perfección sólo porque ellas no son parte de aquel proceso; güea que es completamente entendible (miedo heredado, presión del medio o el simple hecho de ser una vil perra)pero... sólo para terminarte la idea (amiga...) no llores sobre la leche derramada, también coartaste tu cierta parte de las historias (que no me quieres contar) y sólo puedo observarte llorar (de modo simbólico) bajo una guayavera verde, mucho vodka barato y unos cigarros sobre la mesa...

No hay comentarios: